Siderúrgica transnacional logra en Monterrey permiso ambiental "fast track" del gobierno federal
- Javier Cruz
- hace 8 horas
- 7 Min. de lectura
Agobiada por una pésima imagen ambiental que la llevó a ganar el título de ser uno de los 10 consorcios industriales más contaminante del aire en México, la transnacional ítalo-argentino del acero Grupo Techint, obtuvo el visto bueno del gobierno mexicano, en vía rápida, para desarrollar un proyecto “verde” que promete reducir los efectos tóxico de sus emanaciones en Monterrey, Nuevo León, pero también generar grandes utilidades a sus patrocinadores.
Javier Cruz / 4 Vientos

El mega negocio, una planta de recuperación de dióxido de carbono (CO2) crudo que purificará para uso alimentario (bebidas carbonatadas) y se instalará y trabajará por 50 años en la zona este suburbana de la metrópoli regiomontana, promete eliminar 279 mil 955 toneladas anuales del gas tóxico proveniente de las actividades industriales que representan 13 millones 997 mil 750 toneladas en la vida útil de la planta.
A cambio, la factoría producirá miles de toneladas anuales de gas alimentario que, para tener una idea de su potencial comercial que reglamenta la Comisión Reguladora de Energía (CRE), se representa en las tarifas vigentes al mes de diciembre del año pasado de la siguiente forma:
La instalación tendrá dos tanques cilíndricos con capacidad conjunta de cuatro mil toneladas métricas de almacenamiento y un precio internacional aproximado a los dos millones de dólares (40 millones 620 mil pesos a cotización del 12 de abril de 2025).
Pero destaca un hecho: el Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA) de la obra no indica cual es la cantidad precisa de metros cúbicos (toneladas) de gas alimentario que producirá anualmente y en los 50 años de vida útil del proyecto.
Por ello, la cantidad precisa del super negocio no está identificado, por lo que viola el concepto constitucional de máxima transparencia en lo concerniente a sus verdaderos proyecciones mercantiles y financieras.
El documento lo presentó a evaluación en la Secretaría federal del Medio Ambiente (SEMARNAT), un asociado de Techint en México; CRYOINFRA, una subsidiaria del poderoso consorcio gasero industrial INFRA.
El proyecto enfatiza en las toneladas de CO2 que eliminará al año para la empresa subsidiaria del grupo italiano argentino que opera en la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM).
Se trata de Ternium México, S.A. de C.V., que en la megalópolis norteña maneja tres plantas acereras y una recicladora de dos millones de toneladas anuales de residuos peligrosos en donde capturó, en 2023, hasta 280,000 toneladas de dióxido de carbono.
Pero la cifra alude apenas el 3% de la producción tóxica que Ternium emitió ese año en su planta del municipio de Pesquería, colindante con la ZMM: casi dos millones de toneladas de residuos peligrosos como CO2, metano, plomo, cadmio y cromo.
Se trata de una cantidad equivalente a todo lo que genera en un año el estado de California, en los Estados Unidos. Esto según cálculos hechos por el medio ABC Noticias que ha dado amplia cobertura al problema ambiental que Techint genera en Monterrey a través de Ternium.
Por esa cifra, que acreditó el toxicólogo Martín Soto (Universidad Nacional Autónoma de México) y confirmó el Observatorio Ciudadano de Calidad del Aire que integran 15 organizaciones ambientalistas independientes, entre ellas AIDA, El Poder del Consumidor, el Centro Mexicano de Derechos Ambiental, Greenpeace México, el International Council on Clean Transportation, Iniciativa Climática de México, la Red Respira y el Fondo Mundial para la Naturaleza, Ternium se ubicó entre las 10 empresas más contaminantes del aire en el país.
De acuerdo con el Observatorio, tan solo las emisiones peligrosas de Ternium al reciclar materiales corrosivos, explosivos, tóxicos o inflamables, ubican a la compañía que dirige el magnate Máximo Vedoya, ejecutivo de Techint y actual presidente de la Cámara de la Industria de Transformación (CAINTRA) de Nuevo León, en el segundo lugar nacional en tratamiento de residuos peligrosos que contienen cromo hexavalente, que causa cáncer.
Pero el consorcio acerero aplica una estrategia de mercadeo que incluyen campañas y donativos para actividades cívicas -becas universitarias, maratones, voluntariado, campañas de vacunación y talleres educativos-, así como promesas de cambiar sus prácticas monopólicas en la industria nacional del acero, para “lavar de verde” (greenwashing) su profunda huella de contaminación ambiental en la ZMM.
Es ahí donde se ubica el proyecto “Construcción, Operación, Mantenimiento y Abandono de una Planta para la producción de CO2, localizada en el municipio de Pesquería, Nuevo León”, localidad del sureste colindante con la ciudad de Monterrey.

TODO, CON EL APOYO DEL GOBIERNO MEXICANO
El plan lo desarrollarán en sociedad Ternium y la empresa CRYOINFRA, filial a su vez de Grupo INFRA, un conglomerado de 30 compañías asociadas con Air Products and Chemicals Inc., multinacional que ocupa el tercer lugar mundial en producción de gas industrial según reporta en su portal digital ( www.airproducts.com/company ) el 15 de abril.
La historia del proyecto avanzó a una velocidad vertiginosa, pocas veces vista en las burocráticas oficinas centrales de la SEMARNAT.
El pasado 20 de marzo CRYOINFRA obtuvo de la dependencia federal, en beneficio colateral para Grupo Techint, el permiso condicionado para la construcción y operación de la nueva planta gasera.
Correspondió a esa compañía conseguir la autorización ecológica del gobierno federal en un tiempo récord: cuatro meses -27 de noviembre de 2024 al pasado 30 de marzo-, un periodo en el que se incluyó la consulta pública del Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA) que prometió una inversión de 23 millones de dólares (470.6 millones de pesos al tipo de cambio del día 15 de noviembre de año pasado) para ejecutar la obra que abrirá operaciones en 2028.
El motivo de tan inusual efectividad del gobierno mexicano en la resolución positiva de un trámite ambiental, puede ser la noticia de que la siderúrgica Ternium anunció, el 21 de febrero de este año una inversión de 2,500 millones de dólares en México.
Esto pese al historial punible de contaminación ambiental de la acerera y a la imposición de un arancel del 25 % sobre los productos de acero y aluminio fabricados en el país por parte del gobierno de Estados Unidos.
CRYOINFRA ya maneja dos plantas criogénicas en el municipio neoleonés de Apodaca, a tan solo 16 kilómetros al oeste de Pesquería, que producen oxígeno, nitrógeno y argón para las industrias alimentaria, médica y manufacturera, incluida la siderúrgica.
Por su parte Ternium México aportó al acuerdo de sostenibilidad con INFRA, y para reforzar su plan de “descarbonizar” sus actividades altamente contaminantes en Monterrey, un terreno en renta de ocho mil 875 metros cuadrados, libre de vegetación, para la construcción de la planta.
El predio forma parte del "Complejo Siderúrgico en Pesquería, Etapa 3", propiedad de Ternium y que tiene una superficie de 40 mil metros cuadrados, en donde la transnacional ítalo-argentina opera una fábrica de acero que en 2023 emitió 9.24 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (CO2eq), un gas de alto efecto invernadero.
Esa cantidad, según el Instituto de Recursos Mundiales, la Organización Mundial de la Salud y el Observatorio Ciudadano de Calidad del Aire, representó el 37% de las emisiones anuales en la zona metropolitana regiomontana.
Además, Ternium suministrará diariamente 767 toneladas de CO2 crudo a CRYOINFRA, que lo procesará para convertirlo en un insumo clave para la industria refresquera y otras bebidas carbonatadas.

GANANCIAS PRIVADAS, PÉRDIDAS PÚBLICAS
El pasado 18 de febrero, la Cámara Nacional del Acero (CANACERO) y el Departamento de Comercio de los Estados Unidos informaron que, en 2024, la exportación de acero de México al vecino país alcanzó los seis mil 500 millones de dólares para ocupar así el segundo lugar en ese importante mercado.
Y las empresas acereras instaladas en Nuevo León -ArcelorMittal México, Ternium, Deacero y Villacero, ocuparon el segundo lugar nacional en la producción del metal, sólo detrás de Michoacán.
A su vez Ternium reportó en un comunicado institucional que, en 2024 y a nivel global, cerró el año con una ganancia de 106 mil 700 millones de dólares, que representó un incremento de 67% contra los 64 mil millones del año 2023.
Por su parte, CRYOINFRA e INFRA fueron objeto de una multa de 296 millones 323 mil 915 pesos que les impuso la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE) porque las halló culpables de realizar prácticas monopólicas reincidentes en los mercados nacionales de oxígeno, nitrógeno y argón líquido industrial en los años 2017 y 2022.
Este cuadro de constantes abusos ambientales en la producción de acero y gas industrial en Monterrey la cierra el reporte 2024 de la plataforma mundial IqAir, herramienta especializada en calidad del aire que ubicó en la zona noreste y sureste del área metropolitana de Monterrey, a cinco de las 10 ciudades más contaminadas en México con residuos tóxicos suspendidos en el aire.
Se trata de las ciudades Benito Juárez (segundo lugar nacional con una concentración de partículas PM2.5 de 23.2, unidades), Apodaca (cuarto lugar con 20.3), General Escobedo (quinto lugar con 20.3), Guadalupe (séptimo lugar con 19.7), y San Nicolás de los Garza (noveno lugar con 19.3).
Esta contaminación se mide a partir de las partículas en suspensión de menos de 2.5 micras (PM2.5) que se encuentran en el aire y que contribuyen a la aparición de diversas afecciones de salud, como asma, cáncer, accidentes cerebrovasculares y enfermedades pulmonares.
Solo 12 regiones de México registraron concentraciones de PM2.5 por debajo de la recomendación anual de la OMS, que es de 5.0 μg/m³.
Se trata de un acto criminal y de enorme corrupción que deshonra no solo a los gobiernos de Movimiento Ciudadano de Nuevo León, sino también a los del Prian en el estado y la federación, y del partido Morena en el gobierno de la nación.
Así parece entenderlo la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo quien el pasado 4 de abril anunció que su gobierno pondrá en marcha diversas acciones para atender la contaminación en el área metropolitana de Monterrey “hasta tener los resultados de estudios científicos sobre la calidad del aire”.
El análisis, agregó la mandataria, permitirá además este año “medir y determinar no sólo qué tipo de contaminantes existen, sino además, qué los provoca”.
Para información de la mandataria y su gabinete ambiental, esa información ya existe y es pública desde hace al menos una década, pero perversamente ha sido ignorada.
Komentáře