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SALTO CUÁNTICO: Palestina, un dios ultraviolento y un México entrampado en la geopolítica


“Juré nunca mantenerme en silencio cuando los seres humanos soportasen sufrimiento y humillación. Siempre debemos tomar parte. La neutralidad ayuda al opresor, nunca a la víctima. El silencio alienta al torturador, nunca al torturado”.

Elie Wiesel, Premio Nobel de la Paz en 1986.

 


Hay que decirlo fuerte y claro, el estado de Israel es genocida. Que diosito les “dijo” que ahí eran sus tierras prometidas, su Jehová, su Yahvé, o como le quieran llamar, le “dijo” así a Moisés como lo reveló a otros profetas.

 


 


José Luis Treviño Flores* / Edición: 4 Vientos



 


¿Se lamentarán y pedirán perdón por tantas atrocidades cometidas por su gobierno y su dios en contra de las naciones que no fueron "elegidas" para gobernar el mundo? (Imagen: Agencia Reuters).



A su diosito se le olvidó que ahí en esas tierras ya vivía gente, ya había un pueblo. Ah, pero su diosito les “dijo” que no importaba: una vez que terminó la Segunda Guerra Mundial, los sionistas pidieron a las potencias ganadoras que les permitieran ocupar tierras ajenas: dieron recursos a los aliados y ahora querían su pedazo del botín.


Sí, es muy lamentable el asesinato de judíos a manos de la Alemania nazi, pero más lamentable es el genocidio y exterminio étnico del pueblo palestino por el ahora usurpador y colonizador estado de Israel.


Por otra parte, la Convención de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas (UNICEF, por sus siglas en inglés) ha estado compartiendo videos de niños que tratan de ser entrevistados y al escuchar aviones entran en pánico y corren a refugiarse.


En lugar de que la ONU condene y directamente exija la terminación de esa masacre, adopta la actitud de un “call center” de ayuda humanitaria. ¡Es ridículo!


La UNICEF debería solicitar no solo el apoyo de todos los países, sino organizar una protesta y condena mundial por el genocidio cometido por Israel.


Lo cierto es que la ONU es un gran ornamento costoso e inútil que responde exclusivamente a los intereses de la OTAN. Oh sí, pero el “pueblo de dios” es la “victima.”


Y hay que ver el fondo el descaro de los Estados Unidos y Europa surtiendo al genocida con miles de armas y misiles, haciéndolo sin pudor y frotándose afanosamente las manos a la espera del exterminio total del pueblo palestino.



Video en Youtube, canal SDP Noticias.



Desde los sumerios hasta los pueblos semíticos, el dios socorrido es producto de un hongo alucinógeno llamado amanita muscaria que probaron los antiguos profetas.


Se trata de un hongo macerado por vírgenes de 13 años, quienes eran obligadas a resguardar a la amanita en sus manos puras para luego darlo a probar a los sacerdotes encumbrados a fin de que éstos, en su viaje psicodélico, “vieran a su dios” y luego escribieran una serie de mandatos absurdos acerca de colonización, invasión y sacrificios sangrientos.


Y si no me cree, nada más lea esta parte del Antiguo Testamento:



Que mueran los hijos de otros, que mueran todos, menos los judíos. Y así, pasaje tras pasaje, somos testigos de un lúgubre recordatorio de crímenes y vidas tomadas por los israelitas para asegurar su propia permanencia en la Tierra, sin importar ningún otro pueblo, solo el suyo porque nos han vendido muy bien el cuento ese de ser el “pueblo elegido”.


¿Y los musulmanes? ¿Y los budistas? ¿Y los cristianos?, quienes por cierto mandaron matar a uno de sus profetas porque quiso democratizar el uso del hongo para que todos pudieran “ver a dios”.


¿Ninguna otra religión cuenta? No, solo la de ellos porque, insisto, ellos afirman ser el “pueblo elegido”.



Video en Youtbe, canal Historia Incomprendida.



En su libro “sagrado”, la masacre se muestra evidente, descarada y brutal. Solo observe el lector las imágenes de horror mostrando niños mutilados por la ambición de ese pueblo “elegido.”


Entonces, cuando se pide una postura para condenar esa loca carrera homicida, la OTAN condena a su vez y bloquea y asusta con sanciones a los países que pretenden decir esa verdad a la vista de todos.


¿Y el gobierno de México que dice de todas estas atrocidades? Recientemente, un grupo nutrido de ciudadanos, temeroso también, pidió a Claudia Sheinbaum que se pronunciara ante tal masacre. No lo va a hacer porque hay muchos intereses inmiscuidos en la agenda judía, muchos.


Así que, con cuidadito. El llamado mundo occidental está al borde del colapso- El dragón chino y el oso ruso no son un lejano imaginario y ya crearon su BRICS, por sus siglas. Se trata de organismo de comercio entre los países más grandes del planeta en territorio y población.


Lo integran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Su propósito es ampliar su cooperación bilateral y así hacer frente al llamado bloque occidental que integran lose Estados Unidos y sus aliados.


¿Miedo? Sí, tienen mucho miedo las economías castrantes intervencionistas. El BRICS responde al constante bloqueo económico del Grupo de los 8, de la OTAN y sus intereses colonialistas. La guerra en Ucrania y la invasión israelí son su respuesta desesperada ante la pérdida de control geopolítico.


Por su lado, el gobierno mexicano ya emitió una declaración en donde afirma que no piensa formar parte del bloque económico que conforman las naciones del BRICS. Lo hizo cuando Alicia Bárcena Ibarra era secretaria de Relaciones Exteriores, precisando que mantendrá relaciones bilaterales con los países que lo conforman.


¿Miedo también? Sí, estamos muy cerca de Estados Unidos y nuestra economía depende del desigual T-MEC.



Video en YouTube, canal educativo EN MINUTOS.



Así, estamos inmersos en una guerra mundial regionalizada que parece no tarda en brincar hacia un conflicto menos focalizado, ya que Irán, Irak y Siria fueron también atacados por Israel y éste sigue con su escalada bélica.


No es ninguna casualidad, se trata de un plan orquestado por la OTAN para tratar de recuperar su dominio geopolítico en Europa y Medio Oriente, pero peligrosamente está llevando el conflicto a una guerra mundial de facto.


Lo prefiere así porque prácticamente han perdido no solo su credibilidad global, además de tener deudas externas de enormes proporciones.


Ahora bien, al interior del gobierno de Claudia Sheinbaum, y desde el partido MORENA, hay dos facciones: los globalistas y los soberanistas.


¿Qué va a hacer Claudia? La verdad se le ve inclinada hacia los globalistas y esto significa una traición a la herencia de Andrés Manuel López Obrador. Tal vez de pasos hacia atrás en el modelo económico de política social, pero debe cuidar que esto no convierta a los programas sociales en paliativos eternos.


Mejor caminemos hacia la completa emancipación económica de nuestro país.


Ya no podemos hablar de izquierdas y derechas, sino más bien de economías nacionalistas y globalistas donde, en esta última clase, los países intervencionistas y colonizadores son los que están en boga.


¿Hacia dónde, Claudia? Es la pregunta que hoy nos hacemos muchos en este país en transformación.



“Para las personas oprimidas es importantísimo saber que no están solas. Nunca dejen que nadie les diga que lo que ustedes hacen es insignificante”.

Desmond Tutu, activista sudafricano.



 


* José Luis Treviño Flores es profesor y activista social en Juárez, Chihuahua, en donde es subdirector académico de la Secretaría de Educación Pública.

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