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Patear al que te da de comer: Los mexicanos migrantes que sostienen la economía de EU

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    4 Vientos
  • 29 abr
  • 5 Min. de lectura

Actualizado: 30 abr


Si los 38 millones de personas de origen mexicano que viven en Estados Unidos fueran una economía independiente, serían la décima más grande del mundo. ¿Por qué su aporte sigue siendo invisibilizado en el debate político?

 

Crismar Lujano* / Edición: 4 Vientos



Ilustración de Daniel Roldán. ORSAI N5.
Ilustración de Daniel Roldán. ORSAI N5.

La criminalización de los migrantes “es un tema esencialmente racista”, es la opinión de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo respecto a la narrativa estigmatizante contra la inmigración en Estados Unidos. Para México el tema es transversal, lo atraviesa todo.


Ambos países comparten una frontera de casi 3.200 kilómetros, más de 38 millones de personas de origen mexicano (la mayoría con estatus legal) viven del otro lado del Río Bravo y la interdependencia económica es inescapable; va desde las cadenas de suministro en manufactura hasta la agricultura, pasando por el comercio transfronterizo.

 

Para Donald Trump, México (y Canadá) “vive” de Estados Unidos; sin embargo, los datos revelan una realidad diferente: los mexicanos y mexicoamericanos, y en general toda la comunidad latinoamericana, no solo son pilares de la mano de obra, sino actores fundamentales en el crecimiento económico, la innovación empresarial y el tejido social del país, cuya dependencia de la migración sigue aumentando.


Se trata de una fuerza laboral que mantiene en marcha a Estados Unidos.


Al respecto, Sheinbaum ha sido contundente en señalar el carácter estructural de la migración.



“A lo largo de la historia ha habido migración por dos razones: una, la necesidad de las y los mexicanos de buscar una vida mejor para sus familias; y la otra, la necesidad de la economía de Estados Unidos de que haya trabajadores y trabajadoras que ayuden a desarrollar su economía”.

(Claudia Sheinbaum Pardo).



Los mitos más repetidos sobre inmigrantes latinos —que aumentan la criminalidad, reciben más beneficios de los que aportan o quitan empleos— son falsos.



El festejo del 5 de mayo, mercantilizado al máximo por los empresarios del comercio estadounidenses, sigue siendo la fiesta mexicana por excelencia tras la frontera binacional (Imagen: Twitter).
El festejo del 5 de mayo, mercantilizado al máximo por los empresarios del comercio estadounidenses, sigue siendo la fiesta mexicana por excelencia tras la frontera binacional (Imagen: Twitter).

Los porcentajes reflejan una dependencia estructural. Los mexicanos y latinos son la principal fuerza laboral en sectores estratégicos de la economía estadounidense.


Actualmente, estos representan 51% de la mano de obra en granjas lecheras, 20% en construcción, manufactura y agricultura, 15% en educación y salud.


Sin esta mano de obra, buena parte de la industria alimentaria, la construcción y la producción industrial estadounidenses enfrentaría severas disrupciones.


Se trata de un impacto económico equiparable a una potencia mundial.


Es así de claro: si las personas de origen mexicano en Estados Unidos fueran una economía independiente, serían la décima más grande del mundo. Su Producto Interno Bruto (PIB) combinado supera los 2.06 billones de dólares, una cifra mayor que la de países como Italia o Brasil, según datos presentados por Ana Teresa Ramírez Váldez, directora general de Latino Donor Collaborative Think Tank (LDC), el pasado lunes 28 de abril.


California y Texas, estados con fuertes poblaciones mexicanas, tendrían economías entre las 30 y 40 más grandes del planeta gracias a su aporte.


La dimensión económica de estos números contradice el mito persistente de que los inmigrantes son una carga: más bien, constituyen un motor de crecimiento nacional.


Al respecto, Claudia Sheinbaum subraya que “esta idea de que ‘las y los migrantes quitan trabajos’, es todo lo contrario; ayudan a la economía de los Estados Unidos”.



Imagen: Ana Teresa Ramírez Váldez, directora general de Latino Donor Collaborative (LDC / Think Tank).
Imagen: Ana Teresa Ramírez Váldez, directora general de Latino Donor Collaborative (LDC / Think Tank).

Los latinos en su conjunto representan ya la cuarta economía mundial y pronto serán la tercera, con un PIB mayor que el de Reino Unido, India o Francia, por lo que no es descabellado afirmar que la juventud mexicana es ya el corazón del futuro estadounidense


La generación Z y Alfa en el país es, en buena medida, mexicana. Hoy en día 1 de cada 4 jóvenes estadounidenses es latino, 16.1% son de origen mexicano.


También se proyecta que 78% de los nuevos trabajadores entre 2020 y 2030 serán latinos, encabezados por jóvenes mexicoamericanos.


Esto redefine el futuro demográfico, cultural y económico de la Unión Americana.

El avance educativo entre jóvenes de origen mexicano es sobresaliente: +56.7% en titulaciones universitarias, +37% en maestrías y +85.4% en doctorados entre 2012 y 2022.


Igualmente lideran el crecimiento en campos estratégicos como ingeniería, emprendimiento tecnológico y las cuatro grandes áreas de conocimiento en las que trabajan científicos e ingenieros: ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEAM, por sus siglas en inglés).


Esto proyecta a los latinoamericanos, principalmente mexicanos, como una fuerza laboral y de consumo clave para el crecimiento económico del país.


Al mismo tiempo, los empresarios de origen latino, muchos de ellos mexicanos, han impulsado un crecimiento del 44% en negocios propios entre 2018 y 2023, mientras que el resto del ecosistema empresarial estadounidense mostraba estancamiento.


Sin embargo, pese a su importancia demográfica y económica, los mexicanos en Estados Unidos son brutalmente subrepresentados en medios de comunicación, donde padecen invisibilidad mediática y estereotipos dañinos.


También se proyecta que 78% de los nuevos trabajadores entre 2020 y 2030 serán latinos, encabezados por jóvenes mexicoamericanos.



La generación Z y Alfa en el país es, en buena medida, mexicana. Hoy en día 1 de cada 4 jóvenes estadounidenses es latino, 16.1% son de origen mexicano. También se proyecta que 78% de los nuevos trabajadores entre 2020 y 2030 serán latinos, encabezados por jóvenes mexicoamericanos (Imagen: FreePik).
La generación Z y Alfa en el país es, en buena medida, mexicana. Hoy en día 1 de cada 4 jóvenes estadounidenses es latino, 16.1% son de origen mexicano. También se proyecta que 78% de los nuevos trabajadores entre 2020 y 2030 serán latinos, encabezados por jóvenes mexicoamericanos (Imagen: FreePik).

Aunque constituyen el 11.2% de la población, apenas alcanzan entre 1% y 2.8% de los roles protagónicos en televisión, películas y medios. Y cuando aparecen es frecuente que se les retrate a través de narrativas de crimen y marginación.


Esta distorsión mediática contribuye a mantener prejuicios que no resisten el análisis de los datos., por lo que se deben desmontar los mitos que dañan su imagen por el simple hecho de ser inmigrantes.


Para ello es necesario establecer que los mitos más repetidos sobre inmigrantes latinos son falsos.


¿Aumentan la criminalidad en los Estados Unidos?


No hay evidencia que un aumento de la migración esté relacionado con un alza del crimen. De hecho, los inmigrantes tienen 60% menos probabilidades de ser encarcelados que los nativos de Estados Unidos.


¿Reciben más beneficios de los que aportan?


Según un reporte del American Immigration Council, año con año, millones de migrantes pagan miles de millones de dólares en impuestos ante el Servicio de Rentas Internas. Solo en 2022, la cifra fue de casi 100 mil millones de dólares.


Los inmigrantes indocumentados también contribuyen y de hecho “juegan un papel vital en el financiamiento y la sostenibilidad de los programas y servicios públicos de los Estados Unidos”, aunque no reciben beneficios como seguridad social.

¿Quitan empleos?


En realidad, complementan más que compiten con la fuerza laboral estadounidense.



Sheinbaum instó a dejar de utilizar al país como un blanco en campañas electorales, advirtiendo que “México no es piñata de nadie” (Imagen: BBC Mundo).
Sheinbaum instó a dejar de utilizar al país como un blanco en campañas electorales, advirtiendo que “México no es piñata de nadie” (Imagen: BBC Mundo).

En medio de las tensiones comerciales azuzadas por Donald Trump, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, lanzó el pasado domingo un firme mensaje a los políticos estadounidenses.


Durante su visita a Campeche para presentar el programa “Vivienda para el Bienestar”, Sheinbaum instó a dejar de utilizar al país como un blanco en campañas electorales, advirtiendo que “México no es piñata de nadie”.


En su lugar recomendó que, frente a las elecciones estatales estadounidenses de 2026, los liderazgos políticos debieran impulsar campañas que reconozcan la contribución de los mexicanos y de toda la comunidad latina.


“Deberían hacer campañas positivas a favor de México y de los latinos; así tendrían mayor resonancia política en sus estados”, sugirió.


La narrativa dominante en torno a la migración latina en general y mexicana en particular hacia Estados Unidos sigue atrapada en estereotipos y distorsiones.


Sin embargo, los datos pintan una realidad muy distinta: la comunidad latina no es un “problema” a gestionar; y en el caso de México se trata de un socio económico indispensable, un motor de innovación y un eje central del futuro estadounidense.


Reconocer esta verdad no es solo una cuestión de justicia histórica; es una necesidad estratégica para construir vínculos más prósperos e inclusivos.



* Crismar Lujano es periodista venezolana especializada en Economía. Diplomada en Planificación y Procesos Sociales. Fue presentadora y redactora de contenidos en el área económica en la multiplataforma informativa teleSur.

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